[NES] Dragon Fighter


Este juego de acción pasó bastante desapercibido en la comunidad, pero es realmente entretenido.

CONTACTO INICIAL


En 1992 la mayoría de mis amigos y yo estábamos ahorrando para tratar de dar el salto generacional y comprar una SNES, así que el presupuesto para conseguir juegos de la NES era bastante limitado, pero teníamos un amigo al que la familia todavía le patrocinaba su hobby y además cumplía en la primera mitad del año, así que como un regalo recibió un cartucho de Dragon Figther.


Se tardó un par de semanas en terminarlo y luego como era costumbre lo prestó al resto del grupo, así fue que terminé el título por primera vez y lo olvidé, sin embargo, cada tanto lo veía aparecer en listas de juegos olvidados o joyas ocultas, y por eso les traigo esta reseña, porque si es un buen título y pocos lo conocen.

HISTORIA


La verdad empezamos con el pie incorrecto, porque la trama, aunque es buena y tiene bastante desarrollo, solo se puede apreciar a través del manual del juego, habría sido interesante que agregaran al menos una pared de texto para explicarnos quienes somos y cuál es nuestro objetivo.


La versión resumida es que un malvado hechicero atacó una civilización protegida por el espíritu de un dragón, el cual activó una majestuosa estatua que le había regalado a su gente, esta se convirtió en un poderoso guerrero que tras derrotar de forma local a los esbirros del hechicero los persigue a su guarida para acabar con ellos, nosotros somos esta manifestación y nuestra misión es eliminar el mal.

JUGABILIDAD


Nuestro personajes es un guerrero que puede correr, agacharse, saltar y atacar con la espada, todas mecánicas tradicionales de los juegos de acción de desplazamiento lateral. Adicionalmente podemos cargar el ataque para lanzar un ataque a distancia, nuestra vida es poca, pero va aumentando a medida que avanzamos en el juego.


Otro poder importante y que le añade algo novedoso al juego es que, si llenamos al menos la mitad de una segunda barra de energía, matando enemigos, podemos transformarnos en un dragón, en ese momento la pantalla empieza a desplazarse de forma automática y el juego se transforma en un título de disparos.

Para usar la habilidad del dragón, si ya tenemos la mitad de la barra llena, solo debemos saltar y en el punto más alto del mismo presionar hacía arriba, para volver a nuestra forma humana podemos usar una combinación de abajo y el botón de salto o simplemente esperar a que se acabe nuestra barra de poder, la idea es usarlo para salir de situaciones difíciles o ahorrarlo para el jefe de final de nivel.


Otro elemento interesante es que durante los niveles podremos encontrar algunas pociones para recuperar vida, pero también unos ítems con una letra que cambiar el color de nuestro personajes, lo que a su vez modifica el tipo de disparo cargado y los ataques en su forma de dragón, así que es bueno experimentar y ver cual podría ser más conveniente de usar en cada oportunidad.

En total hay 6 niveles para explorar, si bien el diseño de estos no es muy interesante, hay alguna variedad en el tipo de enemigos que encontramos y los jefes requieren identificar patrones para evitar que nos maten; el mundo final se juega todo en forma de dragón y se siente más como un título de disparos tradicional.


La dificultad no es demasiado elevada, mientras somos humanos una buena estrategia es avanzar de forma lenta y mesurada, eliminar a las amenazas más molestas y así evitar que aparezcan demasiados enemigos que nos puedan abrumar. Afortunadamente contamos con 3 vidas y 3 oportunidades para continuar.

GRÁFICOS


El título fue desarrollado por Natsume, quien para ese punto ya tenía casi 2 años de experiencia con la consola, por lo que supieron sacarle provecho a la misma. A primera vista los enemigos se ven un poco pequeños, pero teniendo en cuenta que nos podemos transformar en un dragón y mover libremente por la pantalla todo tiene sentido y el tamaño es el adecuado para que todo se mantenga fluido.


Las animaciones están bien logradas y los escenarios si bien son sencillos tienen bastantes detalles interesantes como pequeños brillos en los cristales de las cavernas, o gigantescos esqueletos que agregan mucha personalidad a los niveles.

SONIDO


La música fue uno de los pocos trabajos de Kouichi Yamanishi quien trabajó en conjunto con Iku Mizutani que tenía mucha experiencia, las canciones son energéticas, perfectas para acompañar la acción, pero con un toque divertido y ritmico que le cuadran muy bien al estilo de juego en cuestión.


Los efectos de sonido son simples pero claros, cumpliendo su función de marcar ataques, saltos, impactos y derrotas de enemigos. Cada acción tiene una respuesta audible reconocible, lo que ayuda a reforzar el ritmo del juego y a mantener una retroalimentación constante durante el combate y la exploración.

COMENTARIOS FINALES


Dragon Fighter es un título desconocido de la amplia librería de la consola, yo lo jugué por causalidad, pero nunca lo volví a escuchar mencionar entre mis conocidos, y es una lástima porque su diseño tiene elementos originales, mecánicamente es muy sólido, la música es muy entretenida y su nivel de dificultad es bastante razonable, es un paquete muy completo que, si bien no deslumbrará a muchos, podría considerarse un excelente exponente del género para la plataforma.


El Juez Goomba dice... ¡Comprable!


Un cartucho original de este juego vale una cantidad obscena de dinero, precisamente porque su salida tardía en la vida de la consola hizo que se produjeran pocas unidades y su popularidad no fue muy alta, si quieren probarlo, la mejor opción es acudir a otros mecanismos, pues tampoco ha recibido relanzamiento o ediciones modernas a diferencia de otros títulos de Natsume.

Valorado en 8/10 espíritus draconianos

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