[PC] Full Throttle

 

Las aventuras gráficas tenían un nivel de ventas adecuado, pero LucasArts quería un éxito de mayor nivel y de esa necesidad nació este título.

CONTACTO INICIAL

Los computadores empezaron a verse en las casas de mis compañeros del colegio desde 1994, eran bastante costosos, pero poco a poco se estaban convirtiendo en una necesidad para presentar trabajos escritos en el colegio, sobre todo en los grados superiores, para que llegara uno a mi casa aún faltaba un par de años, pero eran parte de mi afición y varios los usaban para jugar.

Así fue que probé inicialmente este título, en la casa de un amigo que tenía un PC bastante decente para el momento, con un lector de CDs, algo que tampoco era muy común y con una tarjeta de sonido Sound Blaster que era la locura, pasamos muchas tardes avanzando poco a poco en esta aventura gráfica que era entretenida y no tan complicada.

HISTORIA

La historia empieza en medio de la carretera, el fundador de una exitosa compañía de motocicletas, la única actualmente activa, viaja en su lujosa limosina junto su segundo al mando; cuando son sobrepasados por una banda de la cual somos el líder, el ejecutivo se escucha emocionado al vernos pasar, su compañero parece no tener afecto por la cultura de las motos, pero es quien recibiría el control de la empresa cuando el actual presidente de la empresa fallezca.

En una parada cercana el dueño de la compañía nos invita a servirle como guardaespaldas en el resto de su viaje, pero nuestro personaje Ben indica que la banda no está interesada; el segundo al mando nos invita a discutir el tema en un callejón cercano y recibimos un golpe en la cabeza que nos deja inconsciente, nos enteramos de un plan

Comparado con otros títulos de la empresa la premisa de Full Throttle se puede considerar bastante oscura, pero también algo más realista en una ambientación inhóspita y algo distópica, donde priman las traiciones y la codicia personal, hay algunos toques de humor que hacen presencia en los diálogos y mejoran la experiencia.

JUGABILIDAD

Esta aventura gráfica al igual que las anteriores de LucasArts utiliza un motor conocido en el medio como SCUMM (Script Creation Utility for Maniac Mansion), pero en lugar de complicarlo aún más agregando verbos o acciones a ejecutar fue de hecho simplificado para facilitar el progreso durante la aventura.

Con el ratón indicamos al personaje a donde se puede mover y si encontramos algo con lo que se pueda interactuar, como un objeto o una persona, se despliega un menú que nos permite seleccionar entre 4 opciones, hablar, mirar, agarrar o patear y combinando estas herramientas con las cosas que encontramos en área debemos buscar como resolver acertijos sencillos y progresar en la trama.

A diferencia de otros juegos donde las soluciones de los acertijos que nos encontramos son super enredadas y oscuras, en este título la mayoría tienen sentido, si bien pueden ser un poco difíciles de completar porque debemos interactuar con un objeto muy específico, como ubicar unas ganzúas en una habitación, una vez las tenemos en la mano es claro donde debemos usarlas.

Otro elemento que nos ayuda es que recibimos una buena cantidad de información de parte de los personajes que encontramos en el camino, muchas veces los objetivos son claros, conseguir estos 3 elementos para reparar nuestra motocicleta, ingresar a una zona custodiada por alguien que debemos distraer, entre otros.

Algo diferente que encontraremos en este juego es una sección donde vamos conduciendo nuestra moto y debemos combatir, en tiempo real, con algunos enemigos, los controles en este punto se sienten toscos y dependemos un poco del azar para encontrarnos con el enemigo correcto para progresar.

El juego es relativamente corto y para los expertos del género algo sencillo, sin saber nada del mismo podremos terminarlo en unas 5 horas, cuando el promedio de las aventuras gráficas de la época rondaba las 8 horas, pero esta es una molestia menor si tenemos en cuenta que el progreso es mucho más intuitivo.

GRÁFICOS

La industria se encontraba en un momento de cambios, en medio de la transición entre 2D y 3D, este juego es viva muestra de ello, aunque todos los elementos fueron diseñados pensando en gráficos dibujados de vez en cuando vemos en las cinemáticas elementos pre-renderizados con gráficos 3D de alta calidad, y que aprovechan esas herramientas para hacer tomas más dinámicas.

El estilo es menos enfocado a lo caricaturesco y un poco más realista, sin perder algo de la exageración que permite que personajes con tan pocos pixeles de altura logren transmitir algún tipo de emoción en sus acciones. Los escenarios a ratos parecen postapocalípticos, pero es por su ambientación futurista y paisajes áridos.

Visitamos varios escenarios diferentes, pero todos conservan características similares, lo que le dan consistencia al mundo, un pequeño pueblo en medio de la nada, una estación de parada para viajeros, un estadio de demolición junto a una fábrica para dar algunos ejemplos, todos con suficiente detalle y consistencia, que se pueden apreciar mejor ya que la interfaz ya no hacía parte de la pantalla como en juegos anteriores de la empresa.

SONIDO

La música de este juego es una mezcla entre canciones propias compuestas por Peter McConnell que nos acompañan durante la exploración de los ambientes y música licenciada de una banda de rock de nombre The Gone Jackals que le da mucha personalidad a las escenas cinemáticas y complementa de forma espectacular lo que sucede en pantalla.

Las voces incluyen algunos actores famosos como Mark Hammil y otros profesionales con algo menos de experiencia, pero todos hicieron un buen trabajo entregando sus líneas, mención especial al protagonista que le da una personalidad ruda a Ben sin usar una voz demasiado grave y con las inflexiones correctas para los momentos ligeros y sarcásticos.

COMENTARIOS FINALES

Se nota que el juego fue pensado para un público más amplio, con una trama interesante, muy buena música, acertijos entretenidos y algo más sencillos de lo usual para el género, una interfaz más amigable y simplificada; para algunos se puede sentir algo corto y algunas mecánicas les faltó pulirlas, pero es un título que vale la pena probar y disfrutar.

El Juez Goomba dice… ¡Comprable!

El juego fue un éxito en ventas, por eso es relativamente sencillo conseguirlo incluso en su formato original como disco suelto, gracias a un acuerdo alcanzado en 2016 el estudio formado por el creador del juego original logró conseguir los derechos y realizó una versión remasterizada que se consigue fácilmente en formato digital y tuvo un tiraje limitado en formato físico.

Valorado en 8/10 bandas de forajidos