[NES] River City Ransom

Don Kunio Kun ha jugado fútbol, volleyball, quemados, juegos de fraternidad y hasta se ha enfrentado a la mafia. Esto último hace en River City en donde va al rescate de su novia.

CONTACTO INICIAL

En mi casa primero tuve una Family, una copia clónica de la Famicom, con sus controles pegados que se podían acomodar en la carcasa; luego, cuando esta se dañó, me compraron una clónica de la NES. Con la Family nunca probé los cartuchos grandes de NES porque pensaba que no servían en ella, pero ya con la Creation, se me abrió un mundo en la tienda de alquileres porque ya sabía que podía pedir de esos cartuchos grandes.

En uno de los sitios de alquileres me encontré con este River City Ransom. Me encantó desde el principio porque tenía los personajes que había usado en otros juegos de deportes pero esta vez en uno de mis géneros favoritos, el beat'em up. Cual sería mi sorpresa cuando descubrí que además del juego a dobles, también podía mejorar al personaje, lo que me dio un juego mucho más largo que otros de la época. Incluso me obligó a tener un cuadernito para a notar unos passwords larguísimos.

HISTORIA

Las pandillas de estudiantes tienen aterrorizada a River City, el líder de esta, el malvado Slick, ha decidido que quiere una chica y se lleva a Cindy a su guarida. Lo que Slick no sabía es que la hermosa Cindy es la novia de Ryan, uno de los estudiantes más populares, problemáticos y que mejor pelea en la secundaria. Así Ryan y su mejora amigo, Alex, se enfrentarán a todas las pandillas que se les opongan; comiendo pulpo o visitando el sauna en los descansos y de paso, mejorando a nuestros protagonistas.

El tono de la historia tiene tintes de humor, con conversaciones en textos cortos, muchas expresiones en los protagonistas y posiblemente algunas frases mal traducidas. Los enemigos nos amenazarán con comentarios al darles golpes o se despedirán con frases sabias como ¡BARF! o ¡BIFF!?. Si bien nuestro protagonista es el mítico Kunio Kun, para este juego decidieron cambiarle el nombre, tratando de hacerlo menos extraño para Occidente. Así terminamos con Ryan y Alex.

JUGABILIDAD

En principio parece un beat’em up clásico, pero que guarda varias sorpresas que lo hacen notable. La primera novedad está en que podemos lanzar puñetazos o patadas, los puñetazos sirven para golpear a los contrario en la cara y las patadas bajas apuntan a sus canillas. Los enemigos se cubren de forma variada dando algo de reto al juego. Aparte podremos tomar muchas cosas del escenario, como barras, cadenas, rocas, pelotas, ruedas, cajas… casi todo puede ser usado como un arma improvisada.

Otra diferencia es que el juego se siente mucho más abierto que otros beat’em ups de la época pues podemos vagar por la ciudad, entrar a tiendas, destruir el parque del pueblo o infiltrarnos en una construcción. El avance es bastante lineal, pero era novedoso poder golpear a varios enemigos para recolectar moneditas y gastar tiempo en varios sitios.

Esto de las monedas es muy importante pues aparte de las peleas o la exploración, tenemos algo de juego de rol en River City Ransom, podemos hacer crecer a nuestro personaje comprando comida o ítems en las tiendas, yendo a espectáculos, al sauna o al gimnasio; y seguro que tendremos que mejorar a nuestros protagonistas pues los jefes que nos encontremos serán bastante retadores.

Vale la pena notar que tenemos un modo a dos jugadores en donde nos podemos hacer daño entre los personajes y además que si caemos nos quitarán la mitad de las moneditas y eso obliga a gastar mucho tiempo para comprar mejoras, lo puede hacerse algo repetitivo.

GRÁFICOS

El estilo artístico de Kunio Kun es bastante característico, con personajes super-deformados, bien cabezones y muy expresivos. Es notable como cada enemigo reacciona ante los golpes, abriendo los ojos o haciendo muecas. Desafortunadamente el desempeño sufre cuando se mezclan muchos enemigos en pantalla o tenemos varios objetos para arrojar; haciendo que algunas veces parpadee la pantalla o se ralentice.

Los escenarios son variados, coloridos y están diseñados de forma que obligan a estar atentos a los riesgos del piso, las plataformas o los múltiples peleadores que se agrupan en alguna zona. Los enemigos no son muy variados en su diseño, cambiando apenas algo de su cara o el color de la camisa, agregando un mostacho o lentes.

SONIDO

Los efectos sonoros son satisfactorios. Los puñetazos y patadas tienen su propio sonido, la caída de los enemigos y los golpes de armas también son muy adecuados. La banda sonora mezcla tonadas alegres para la exploración de la ciudad, otras inspiradas en rock para los combates y otros más parecidos a blues o jazz para cuando estamos en restaurantes.

Los jefes tienen tonadas más fuertes en donde parecieran tener más percusión y ritmo más acelerado; todo hecho con chiptune y muy de la línea de lo escuchado en juegos de la compañía desarrolladora, Technos, como Double Dragon o Renegade, a los cuales hay algunas referencias.

COMENTARIOS FINALES

River City Ransom es un Beat’em Up de NES que mezcla elementos de otros juegos, con algo de plataformas y juegos de rol. Tiene escenarios variados que dan algo de libertad al jugador en su exploración de la ciudad y la mejora de los personajes.

Puede jugarse en solitario o cooperativo resultando en un buen reto. Tiene una mayor duración comparado con otros juegos del género; esto se debe principalmente a la necesidad de llevar a nuestro personaje a niveles adecuados para enfrentar a los jefes, lo que puede obligar a hacer algo de trabajo pesado pero que no le quita su genial identidad y lo pone entre los mejores juegos de la consola.

El juez goomba dice...¡Comprable!

River City Ransom para NES, se lanzó en 1989 en Japón como parte de la serie de Kunio Kun, salió en occidente un año después y se conoció como Street Gangs en Europa. Fue desarrollado y publicado por Technos, creador de otros juegos de renombre como Double Dragon o Nintendo Cup. Se puede encontrar en la plataforma digital de Nintendo y compilaciones de la consola. Tuvo ports a muchas otras plataformas.

Valorado 8/10 BARF!